Los jueces del Tribunal de Punta Arenas, entregaron el veredicto condenatorio en contra de un sujeto acusado de violar a su hija desde los 4 a los 6 años de edad. A su vez, se sumaron nuevos antecedentes que indicaron que previamente el hombre habría cometido otra agresión sexual de la misma forma hacia otra persona.
En el fallo se especifica que la decisión fue tomada a partir de “la prueba testimonial, documental y pericial incorporada por el Ministerio Público y a la que adhirió la parte querellante y acusadora particular, elementos de convicción que han sido de una entidad suficiente para tener por acreditada la existencia del ilícito”. A su vez, se acogió la agravante de parentesco entre el agresor y la víctima.
Recordar que el sujeto al estar separado de su madre, aprovechaba la instancia de las visitas para abusar de la menor. Así lo hizo en cuatro oportunidades entre el 2010 y 2012. La niña detalló que en esas instancias el hombre le vendaba sus ojos tanto para violarla, como para obligarla a realizarle sexo oral.
El testimonio anterior, coincidió con otro caso que la Policía de Investigaciones encontró en Quilpue, donde otra presunta víctima señaló la misma forma de cometer agresiones sexuales por parte de ese sujeto. La abogada del programa de representación jurídica, Claudia Guerrero, dijo que ellos “dieron a conocer una denuncia por un hecho similar en esa comuna, lo que entregó mayor credibilidad a la causa”.
Finalizó detallando que encontraron esos “antecedentes mientras intentaban ubicar al imputado, esto fue lo que se expuso en el juicio, que el acusado también habría vendado los ojos a otra víctima para cometer una agresión sexual”.
