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En una ceremonia solemne 30 personas despidieron al Príncipe Felipe, duque de Edimburgo

  • Sábado 17 de abril de 2021
  • 16:24 hrs
Reina Isabel II se sentó apartada de todos los otros asistentes.

Reina Isabel II se sentó apartada de todos los otros asistentes.

Entre los asistentes estuvo la Reina Isabel II; el Príncipe Carlos; el Príncipe William, Duque de Cambridge; Kate, duquesa de Cambridge; y Harry, quien viajó desde Estados Unidos.

Durante esta jornada se desarrolló el funeral del duque de Edimburgo, en la capilla de San Jorge, en Windsor, en dicha solemne ceremonia se conmemoró la vida y el legado del consorte de Isabel II, con sólo 30 personas y un pequeño coro que interpretó temas seleccionados por el mismo príncipe Felipe. 

Debido a la pandemia del coronavirus, fue un acto sobrio, sin sermón ni discursos de familiares o allegados, puesto a que sólo solo hablaron el deán de Windsor y el arzobispo de Canterbury, con curiosos detalles diseñados en vida del propio duque de Edimburgo.

El histórico evento estuvo marcado por un cotejo fúnebre que contó con una fuerte presencia de las Fuerzas Armadas británicas y contó con un altar de nueve cojines decorados con insignias significativas para el difunto.

Entre ellas, medallas y condecoraciones que le fueron asignadas por el Reino Unido y países de la Mancomunidad Británica de Naciones (Commonwealth), junto con la insignia alada de la Real Fuerza Aérea (RAF) o las insignias de Dinamarca y Grecia -Orden del Elefante y Orden del Redentor respectivamente-, en un guiño a su infancia como príncipe de Grecia y Dinamarca.

Ceremonia simple y solemne

La Reina Isabel II se sentó apartada de las otras personas, vestida con un riguroso negro, con sombrero y mascarilla del mismo tono.

El resto de los invitados rompió la tradición que normalmente los obliga a vestir uniforme militar en funerales reales, sin embargo, fueron de civil. Esto se debería a una nueva medida adoptada por la monarca para, presuntamente, evitar que su nieto Enrique quedara excluido de esa etiqueta protocolar.

El hijo menor de Carlos de Inglaterra y la malograda Lady Di perdió sus títulos militares cuando en 2020 se apartó de sus funciones como miembro de la realeza para llevar una vida independiente, fuera del Reino Unido, junto con su esposa, Meghan, duquesa de Sussex.

Los varones llevaron abrigo negro, con medallas e insignias mientras que las mujeres vistieron atuendos de día.

En la ceremonia, basada en lecturas bíblicas y cantos religiosos, el duque fue descrito como un hombre "amable, con sentido del humor y humano", por el deán de Windsor, David Conner, el único que tomó la palabra junto al arzobispo de Canterbury, Justin Welby.

"Nos ha inspirado su lealtad inquebrantable a nuestra reina, su servicio a la nación y a la Commonwealth, su coraje, fortaleza y fe. Nuestras vidas se han enriquecido a través de los desafíos que nos presentó, el coraje que nos dio, su amabilidad, humor y humanidad", dijo Conner en casi la única referencia personal en el funeral al difunto, por expreso deseo suyo.

Los restos mortales del duque de Edimburgo serán inicialmente depositados en el panteón real bajo la capilla de San Jorge.

Si bien el ataúd del marido de la reina Isabel II yacerá inicialmente en esa cripta, está dispuesto que cuando la monarca británica muera, se le trasladará a la capilla conmemorativa de estilo gótico de la iglesia Rey Jorge VI para que el matrimonio esté enterrado en el mismo lugar.